lunes, enero 16, 2006

Emma

Surgiste como una luciérnaga.

Yo que sabía de tus silencios,
de tus palabras tajo,
me enfurecí.

Nadie debía mancharte.
Eras única entre tantas.

Surgiste como un ángel
y te mudaste
al castillo de los sueños.

Yo no te seguí.

2 comentarios:

sa dijo...

ay
...me emocionas constantemente

Isabel Bertossi dijo...

:)

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