lunes, enero 16, 2006

16/1

un coche casi muriéndose se detiene en la esquina
una mujer gorda tan gorda como mi sombra
se arrodilla y me recuerda que necesito
vestirme de caras tristes
para seguir aquí
en donde habito

2 comentarios:

இலை Bohemia இலை dijo...

Lo he leído tres veces y las tres veces me ha sorprendido. Me gusta!

Isabel Bertossi dijo...

¡Qué bueno, bohemia! Gracias.

La envidia

 Y la envidia se vistió de mujer oscura, se maquillo los parpados, se miro en el espejo, Se ajusto los botones de un traje viejo y raído, ...