Entiende, extranjera, el dolor del viento y camínate todos los olvidos y todos los silencios en un adiós impronunciable hasta tu nueva patria, sin mirar siquiera la mano de quien no te saluda en tu desgracia
Ya habrá tiempo para romperse la espalda con el único grito de tu voz
Ya habrá tiempo para romperse la espalda con el único grito de tu voz
1 comentario:
Me gusta mucho la incorporación de imágenes que has añadido a tus comentarios.
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