domingo, enero 22, 2006

22/1


Huyamos de la presencia de las cosas. Recojamos su inutilidad como un regalo. Básicamente todos esperamos algo. Mejor no esperar nada. Que alguien te sorprenda.

No hay comentarios.:

La envidia

 Y la envidia se vistió de mujer oscura, se maquillo los parpados, se miro en el espejo, Se ajusto los botones de un traje viejo y raído, ...