domingo, abril 09, 2006

Futurología

Veo crecer una taza de leche en mis rodillas y mi canto es una voz exigua. ¿A dónde arde el silencio? Luego correrán somníferos tras el hueco de un corazón que nunca estuvo. Y renaceré en la más mínima incertidumbre:

M. estuvo allí y no la oyeran. Se murió de páginas en blanco y nunca la dieron por muerta”.

2 comentarios:

Lucas Centurión dijo...

en la mas?

Isabel Bertossi dijo...

mmmmmmm, lucas no entendí. :)

La envidia

 Y la envidia se vistió de mujer oscura, se maquillo los parpados, se miro en el espejo, Se ajusto los botones de un traje viejo y raído, ...