miércoles, marzo 08, 2006

La ensalada y el machismo


Muchos dicen que el mundo está cambiando y que los arquetipos de lo femenino y lo masculino han sido abandonados para dar paso a la tan mentada igualdad sexual. Algunos hablan de un nuevo tipo de hombre, más preocupado por sus emociones y su estética. Sin embargo, salir a comer afuera con tu novio puede tirar abajo años de lucha feminista y de revolución sexual.

El lunes a la noche fuimos a cenar afuera con Fabián, mi novio. El mozo se dirigió a Fabián en todo momento. Yo no existía. Estaba pintada al óleo. La única vez que fui objeto de su atención fue cuando se dignó a alcanzarme los aderezos y la cuchara para la ensalada, elementos que ni siquiera le había pedido. Pero era de suponer que siendo la mujer, tenía que condimentar, revolver y servir la ensalada. Fabián, el hombre y según la concepción del mozo, estaba para elegir y ordenar la comida. Al finalizar la cena, el mozo sólo interrogó a mi pareja por el gusto de la misma. Yo seguía siendo parte del decorado. ¡Condimentar y servir no debería ser una cuestión de géneros!

No obstante, y a pesar de mi desventura culinaria, aprovecho para desearles a todas las lectoras de este blog un muy feliz día de la mujer. Ustedes se lo merecen.

5 comentarios:

makkkafu dijo...

¿no estaría escondiendo el susodicho camarero su miedo casi "ancestral" a la mujer? ...

hago esta pregunta así, casi sin pensarlo.

Afectuosamente Makkkafu.

Isabel Bertossi dijo...

¡Gracias, Clara! El mío fue un día ajetreado, pero lindo. No tuve muchas salutaciones por mi día. Jajajaja, pero bueno… Igual no note que acá en mi ciudad se le diera mucha importancia. Algunas mujeres con flores por la calle, yo con carpetas y papeles. :)))

Un abrazo.

Isabel Bertossi dijo...

Mmm, ¿cómo saberlo, Makkkafu? Quizás simplemente sea un machista o alguien que pensaba que el hombre está para una cosa y la mujer, para otra. Tampoco es tan grave, jajajaja.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Interesante escrito, saludos!

Isabel Bertossi dijo...

Gracias, anónimo.
Saludos.

La envidia

 Y la envidia se vistió de mujer oscura, se maquillo los parpados, se miro en el espejo, Se ajusto los botones de un traje viejo y raído, ...