domingo, diciembre 17, 2006

I

Una mujer descubre el silencio
y entiende que las rosas de invierno
podrían marchitarse

2 comentarios:

J.Huerta dijo...

El silencio también fecunda la creatividad.
Feliz Navidad y espero seguir leyendo tus preciosos poemas en el 2007

Isabel Bertossi dijo...

Muchísimas gracias, Jeús. Te deseo lo mejor para estas fiestas que nos pisan los talones.

Un fuerte abrazo.

La envidia

 Y la envidia se vistió de mujer oscura, se maquillo los parpados, se miro en el espejo, Se ajusto los botones de un traje viejo y raído, ...