domingo, diciembre 03, 2006

Apenas verla

I
Entonces, no tuvimos más que verla,
cansados, efímeros
supimos naturalmente que se trataba de ella,
tan lejana como el suspiro

y apenas verla,
fue el destierro, la agonía,
el ir y venir sin sentido

Apenas verla,
entendimos que humo y espejo
muchas veces escriben juntos
esta parte del destino

II

Entonces supimos por ella
que a esta altura de la noche
la vida es río y los ojos
trampas que tejemos
en el olvido

Apenas verla,
se fue el destino.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

te estas revindicando

QUE BUEN ESCRITO! me encantó!

Isabel Bertossi dijo...

Me alegra que te haya gustado. Como sos mi lectora más fiel –lo cual se agradece mucho- o quizás seas la única :) , incluso que ha sobrevivido a varios blogs, me reconforta saber tu opinión. Muchas gracias, en serio.

No sé que tendrá que ver con esta respuesta, pero hoy me acordé de mis antiguos blogs, ¿alguien de por aquí se acuerda de ellos?

http://milagrosdepan.blogspot.com/ Dirección que un viejo lector se agarro para vender productos de aloe, y

http://ciudadpoetas.blogspot.com/ Dirección que ocupó un tal rambo, que escribe en inglés. Juas, así es la vida…

Anónimo dijo...

Me acuerdo perfectamente de Milagros de Pan. Si algo me gustaba mucho de ese blog, era justamente el nombre. Suena como dadivoso, generoso. Rarisimo en lo que se convirtió, pero será que la aloe tiene las mismas propiedades, no lo se, ja.

Desde ahí que te sigo. Ya es parte de mi vida cotidiana, pero no es rutina, OJO!.

Me gusta leerte porque son textos cortos y de mucha genialidad en muchos casos. A veces me identifico, a veces no, pero practico el tratar de interpretarlos, y muchas veces me dejan... wow... tildada.

La envidia

 Y la envidia se vistió de mujer oscura, se maquillo los parpados, se miro en el espejo, Se ajusto los botones de un traje viejo y raído, ...