viernes, noviembre 11, 2005

Incredulidad

descreo del mundo
de sus personas habitantes
del color de la rosa cuando a la noche
una luciérnaga se olvida el rostro cansada
de la luz de su propio cuerpo

descreo de robarse los apuntes
o de comer en alguna plaza o de romper carteles
en alguna manifestación y protestar
porque sí, porque llueve o porque
nos morimos de hambre

descreo de las palabras pegajosas,
iracundas, intercambiables,
de los objetos perdidos
de la gente que dice amarte

y luego vuelve la mirada contemplándote
con lástima o asco

al fin de cuentas se trata de eso
vivir es un poco ponerse la careta
y a la calle

también aclaro que descreo de eso

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