jueves, octubre 05, 2006

Dicho a las cinco de la mañana

A veces el tiempo
es un pájaro bobo
riéndose de nosotros
y la vida
como una mano apretada al cuello
te va llevando

hasta cerrar los ojos


PD: No todo lo que digo a esa hora es recomendable para la salud. :-)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Si el apretón es auto-inflingido brindo por ello.

(No sé porqué pero me recordó el final de la "Regenta" -voy a tener que dejar yo también de trasnochar :) )

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