sábado, agosto 18, 2007

Adiós

Te vas y vuelve a cantar con la misma fuerza de siempre, pasionaria.

Te vas. Quise mirarte a los ojos y llorar toda la noche, pero no estabas. No había nadie. Ni un solo signo de tu despedida. Eras huella bajo mi silencio, escombros bajo un cielo que no daba lugar a la locura.

Entonces, tomaste mis manos en sueños y me prometiste regresar. Quizás mañana cuando los pájaros profesen su más eterno vuelo, puedas volver y sonreír.

Mientras tanto, nada.

3 comentarios:

Lucas Centurión dijo...

mientras tanto, nada.

=/
(gesto de "bien"+"pensando")


un beso, nada más.

Isabel Bertossi dijo...

muchas gracias, lucas, es bueno saber que todavía quedan algunos amigos en este blog que tengo tan abandonado.

beso.

Anónimo dijo...

Y si. Yo también me pregunto por qué lo tenés tan abandonado. Pensé que lo hacías por esas formulas extrañas de Ad Sense, según las cuales había que publicar poco, pero con constancia. Eso me pareció mal. Ahora, aparentemente descubrimos (tus lectores) que lo tenés abandonado por otras cuestiones. Y bueno, asi tendrá que ser. Si pudiera pedir algo, yo te pediría que escribas más, pero buscando despersonalizar un poco, me parece que deberías enfrentarte con la acción misma de escribir poesía más allá de tus vivencias, más allá de las ligas personales ante la escritura. Eso yo te pido. Seguramente no es fácil, pero salirnos de las autoreferencias nos permite darle ese giro necesario a nuestros textos. Un abrazo.

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